martes, diciembre 31, 2013

Cerrando el serpenteante 13

Este no ha sido un año fácil. De aprendizajes seguro, sencillo para nada. Pero no haré un resumen, es imposible y -pienso- inútil. Prefiero cerrar la puerta, cargar con lo que me puedo llevar para crecer y lo demás... hasta la vista, baby.

*no tengo el crédito de la foto, si alguien lo sabe que me lo pase ;) 


He leído mucho menos de lo que esperaba, novelas al menos. Cuento 17 y un libro de ensayo. Creo que hace años de años no leo menos de 20-25 novelas y aunque sé que tampoco está mal, me sabe a poco. Dejo acá la lista...



  • Los buenísimos

Los enamoramientos, de Javier Marías
Una mujer difícil, de John Irving (relectura)
La tabla rasa, de Steven Pinker (ensayo)


  • Los buenos

La verdad sobre el caso Harry Quebert, de Jöel Dicker
La mujer del viajero en el tiempo, de Audrey Niffenegger (relectura)
Snuff, de Chuck Palahniuk
¿Sueñan los androides con ovejas electrónicas? de Philip K. Dick
El tiempo entre costuras, de María Dueñas


  • Los regulines

Guerra Mundial Z, de Max Brooks
Wonder, de R.J. Palacio
El lado bueno de las cosas, de Matthew Quick
The bell jar, de Sylvia Plath
El cielo es real, de Todd Burpo
Otra vuelta de tuerca, de Henry James


  • Los tirando a malillos

Una familia como cualquier otra, de Silvia Teslo
Cell, de Stephen King


  • Los pésimos

Una familia feliz de David Safier


lunes, noviembre 11, 2013

La trampa facebookeana

Hace unos días desactivé mi cuenta de facebook, necesitaba vacaciones. 24 horas después tuve que volver a activarla, porque tengo varios programas/apps/páginas vinculadas a mi cuenta de facebook y si desaparezco de una, desaparezco de las otras.

tomada de http://yucatan.com.mx/wp-content/uploads/2013/10/face.jpg


Ya sé que es evidente que esto pasaría, pero como uso el facebook en automático, no me había parado a pensar en que mucha parte de mi vida cibernética pasa por ahí... por ahí o por google.

Cuestión que también me di cuenta de otra obviedad, y es que facebook es más que una red social: es un puto vicio. Vicio para lo bueno: ver y comentar sobre la vida de la gente que uno quiere, pero también para lo malo...

He visto la lista esa de usuarios molestos de facebook que circula... y hay ciertos tipos de usuario que me ponen nerviosa, pero lo que me llama la atención es que usamos la red social para cosas raras. Por ejemplo:

Demostrar lo "X" que somos: divertidos, felices, espirituales, religiosos, creyentes, ateos, profundos, empáticos, viajeros, filosóficos.

Discutir por cosas que en una mesa de tragos sería divertido y que en FB se vuelven una bomba de bilis. El mejor ejemplo: nacionalismos, patriotismos, religión, política.

Insultar a gente que en persona no nos atreveríamos a insultar.

Y la que personalmente me pone más nerviosa:

Lanzar indirectas o comunicarle al mundo los pesares que uno padece: ay de mí, ay de mí. Por ejemplo: "hoy me hicieron daño como pocas veces. Ay, aprendizaje". Lo peor es cuando la gente pregunta qué pasó y la persona en cuestión no responde... o sea, si es privado NO lo ponga en FB para empezar. La variante 2: hoy en el doctor y luego no explican qué pasó... de nuevo, si es privado, NO lo ponga en FB.


Aunque ahora que lo pienso la culpa no es de facebook, es sólo un reflejo de cómo funcionamos los grupos humanos.

Buf.

miércoles, septiembre 25, 2013

Ay el cansancio productivo

Llevo meses de bólido, pero la planta va creciendo. Pienso que pronto dará frutos, y eso en una profesión como la mía es mucho. Mientras tanto duermo cuando puedo, como cuando puedo y sobre todo intento ser productiva aunque el cerebro diga basta.

Dentro de una semana me voy a Costa Rica con tres colegas de teatro, vamos a acabar de ensayar (y a estrenar) una obra de mi autoría que se llama "Baile y son de don Patricio Carambolas". Está siendo todo un viaje el proceso, me hago gracia a mí misma aunque suene pedante, pero es que ¡es muy divertida! Por cierto hemos empezado una campaña de crowdfunding para acabar de financiar el proyecto: http://www.verkami.com/projects/6500-baile-y-son-de-don-patricio-carambolas

Me he enviciado al Candy Crush. No entiendo con qué tiempo.

Quiero leer, no veo con qué tiempo.

Y quiero dormir un poquito.

Eso.

viernes, julio 26, 2013

Lo que vende o lo que hace pensar...

Esta semana he ido a dos encuentros sobre teatro. Uno, con Ramón Simó (director de teatro y actual director del Festival Grec) y Michael Billington (crítico teatral británico) hablaba sobre el teatro comercial y sus perspectivas frente al "otro" teatro. El segundo, esta mañana, fue con Jordi Coca (escritor y estudioso del teatro, entre otras cosas) y Claudio Tolcachir (autor y director teatral) sobre el teatro político.

Al salir de ambas actividades me quedo con la sensación de que vivimos con la venda en los ojos. Que si el teatro comercial es el diablo, que si el no comercial no se entiende. Cuánta presuposición...

Entonces, pienso yo... la cuestión de fondo es la perspectiva. Es verdad que hay producción -ya no sólo teatral, sino artística en general- hecha para las grandes masas sin ánimos de reflexión. Pero, y he aquí el quid de la cuestión... ¿quién establece el baremo de lo que no es eso?

Por otra parte, toda producción siempre tendrá un ánimo de ser, como mínimo, autosuficiente. A menos de que vivas de las rentas, en cuyo caso es casi un hobby.

En todo caso, mi duda es... hablemos de series. ¿Six feet under es comercial o de lo "otro"? ¿O las dos? ¿es posible hacer conseguir con equilibrio y es eso lo que habría que buscar, en vez de tirarnos lo trastos a la cabeza?

Mientras tanto yo escribo lo que puedo, ya veremos si es comercial o de lo otro, o si consigo la utopía de comunicar, conmover, gustar a la vez que hacer pensar, cuestionar, reflexionar.

viernes, julio 12, 2013

Gravedad zero...


Leer este post con voz de doblaje español, por favor.


...


Viernes por la mañana. Entro a una tienda de accesorios especializados en X. Digamos que en alas y zapatos antigravedad, por decir algo. El dependiente, "Frankie" por ejemplo, está conversando sobre los modelos, el material, etc. Bien... hasta que me doy cuenta de que, en realidad, le encanta conversar y su deseo real sería tener un bar donde todo el mundo se sepa tu nombre. Lo noto cuando Frankie dice "Joder, Joe, es que esas tiendas son una basura, colega, tienes que venir aquí, en esas tiendas, colega, te tratan como uno más. Yo no, Joe, sabes bien que yo no. ¿Y cómo están las niñas, tío?".

Tras 40 minutos esperando (2 clientes más) me toca turno. Para entonces tres personas han esperado, se han hartado y se han ido, pero otras tres aguantamos estoicas nuestro momento con Frankie. Frankie parece no inmutarse de que la cola se haga enorme y de que los clientes se le vayan. Porque Frankie se lo pasa bien vendiendo zapatos antigravedad y alas.

"Tienes con bordado post venusianas, con llamas de saturno, con espinas lunares"... dice Frankie. Hace rato que no entiendo nada de lo que dice. Habla a un nivel de especificidad que se diría que es física cuántica multi molecular.

Me toca el turno.

Cuestión que yo ayer había pedido por teléfono que me reservara unas sandalias no-flow gran voladoras. Ayer. Ayer hacia las 8 pm. No han pasado muchas horas, de hecho la tienda cerraba a las 9 pm y abría hoy... exactamente 20 minutos antes de que yo entrara por la puerta. Así que en horas laborales, le pedí las sandalias no-flow gran voladoras hace 1hr y 20 mins.

Las busca.

Las busca.

Diez minutos después... "tía, lo siento, pero que no las encuentro".

Yo lo miro con cara de póker. Primero porque he esperado 50 minutos. Y segundo porque -llamadme chapada a la antigüa- no me gusta que me llamen "tía" en ninguna tienda.

"Es que no las tengo, te juro que ayer las tuve en la mano". Se lleva la mano a la cabeza. Me mira. "Joder, colega, o me las han pispa'o o no sé qué pasa, las tenía ayer". Ayer no, Frankie, AYER NO. Las tenías en la mano hace 1 hora jodida hora con 20 jodidos minutos. Me has fallado, Frankie. Y encima usas "pispar"... que es como palabra inventada, colega. Joder Frankie, no lo esperaba de ti.

50 minutos de mi vida que no volverán. Frankie se las ha "pispa'o".

Ahora, esto se explica con señalar un par de detalles:

a. Uno de los clientes que atendió es un "amigo de la casa". Lo llama por su nombre: "Michael", por ejemplo. Michael entra y se le nota a la legua que debe tener las botas antigravedad más especiales del mundo, únicas, customizadas. Michael es ese tipo de tío, lo ves con una mirada rápida.
Frankie no ha hecho lo que Michael le pidió hace unos días, pero le dice que lo llamará cuando lleguen sus alas newtonianas green division. Antes de que salga le dice: Perdona, Michael, dame tu número de teléfono. Charlie flipa, se ríen los dos. "Joder, Frankie, sabes mi nombre, sabes mi jodido nombre, hasta diría que sabes mi dirección, colega", dice Michael. Le repite el número y Frankie lo anota en su libreta. Una de las tres que tiene llena de apuntes encima del mostrador, que no guardan ningún tipo de orden.

b. Otro de los clientes, "Little Pete" se ha llevado 375 euros en zapatos y alas. Le convenció de la aerodinámica de no sé qué y... 375 euros. De las alas que no se llevó Little Pete aún quedan cinco pares encima del mostrador. Son alas caras, carísimas. Frankie se ha ido tantas veces del mostrador que le podría haber "pispa'o" las alas caras si me hubiese dado la gana.

De aquí es fácil deducir que... Frankie, tío... la crisis a ti no te toca, Frankie, debe ser por los zapatos antigravedad y las jodidas alas. Eres un jodido chaval con suerte.

miércoles, junio 05, 2013

Sobre los Géminis

Ilustración tomada de:
http://galileogst.tumblr.com/


Es muy curioso esto de los signos zodiacales. A veces creo, a veces creo que quiero creer y otras veces no acabo de creer. Pero como dicen los gallegos sobre las brujas: de haberlas, haylas.

Me explico: he tenido dos relaciones y media que podemos considerar "serias". Estas tres personas con las que he estado, incluyendo al señor Marido Vikingo, son géminis. Tengo muchos amigos y amigas del mismo signo y en todos los casos me parecen personas apasionantes, interesantes, llenas de una energía que me atrae.

El caso más gracioso que recuerdo fue con un profesor. Feo como él solo, fumador empedernido de esos que ya dan grima. Nada impresionante como pedagogo... pero me resultaba atractivo. No físicamente, para nada, pero había algo en él que tenía el poder de hipnotizarme. Me pasé meses escuchando sus clases medianamente aburridas por un motivo que no sabía explicar. La penúltima clase lo entendí todo cuando dijo, como quien no quiere la cosa: soy géminis.

Y eso que dicen que Tauro-Géminis es mala combinación. Si sumo los años (en total) que me he pasado con un géminis de pareja suman 15 años. Tanto años de relaciones con este signo demuestran que las casualidades son enormes en esta vida... o realmente los astros me llaman.

lunes, junio 03, 2013

Señoras, y señores, lo hemos conseguido

Conseguí pasar diez días comiendo arroz rojo y agua hervida, puedo decirlo ¡lo conseguí!

Yo hubiese creído que los primeros días eran los más difíciles y sí, el primero fue tremendo... pero realmente los nefastos fueron los tres últimos. Supongo que pasada la semana, el cerebro empieza a boicotear el asunto. Tanto que el arroz me sabía mal, como si estuviera a medio pudrirse, a pesar de que estaba recién hecho.

Ahora voy de re-entrada a la dieta normal, aunque ayer pequé un poco.

Nada que no pueda remediarse con unos cuantos días de portarme bien.

Lo mejor es la sensación de bienestar, muy fuerte. Y ya ni hablemos de la disminución de varios padecimientos. Todo por arroz, sésamo y sal del Himalaya.

Tampoco digo que me hubiera pasado diez días más en estas, no exageremos, pero ahora me siento preparada por si me toca repetir.

lunes, mayo 27, 2013

Dieta del arroz rojo, día 7

Ha sido menos duro de lo que me esperaba, aunque el primer día estaba que me arrastraba por el suelo. Ahora, la verdad que estoy hasta los santísimos ovarios de comer arroz, muero por un tomate, un calabacín y un bol de helados con fruta por encima.

Por lo demás recomendadísima. Me quedan tres días, el sprint final.


martes, mayo 21, 2013

Semi ayuno is in da jaus

Grandes males reclaman grandes remedios...

Ayer empecé un semi ayuno que consiste en comer arroz rojo, todo el día. El primer día fue durito, además de la sensación física de estar agotada, sueño, dolor de cabeza, la verdad es que el cerebro me iba a pocas revoluciones. Zombi total.

Pero hoy me he despertado sintiéndome como un millón de euros.



El principio del semi ayuno, que estoy haciendo bajo supervisión médica, es conseguir regenerar la sangre. El arroz rojo tiene un montón de propiedades que combinadas con sésamo y sal del Himalaya, se ve que me dejarán con el organismo limpito.


Vamos a ver cómo avanza esto... serán diez días en total.

lunes, mayo 13, 2013

Yelmo Icaria y olor a mier...

Cierran cines, los de la industria se quejan de que los espectadores se quedan en casa y se bajan las películas de internet. Unos cuantos, sin embargo, seguimos considerando que vale la pena ir a la sala, aunque sea evidentemente más caro que ver las películas por internet o -esa salomónica opción- comprar la película y verla en casa en dvd o blue ray.

Pero entonces parece que estemos destinados al castigo:


Si compras la película toca ver la amenaza a los piratas... copiar películas es un delito, etc etc... incluso algunas peliculas incluyen pantallas que tardan un par de minutos en desaparecer de la retina y que no te permiten ir al menú del dvd.

Y si vas al cine... Ay si vas al cine: instalaciones deficientes en muchos casos y olores terribles. Sí, señores, si se os ocurre ir al Yelmo Icaria en Barcelona ni por broma entréis si la película es en la Sala 7, porque la sala 7 está al lado del baño y huele... a lo que huelen todos los baños públicos.

Vergüenza debería darles.


2 viajes en tram ida y vuelta: 4 euros
2 entradas al cine: 16 euros
Olor a mierda durante 125 minutos... No tiene precio


Hay cosas que el dinero no puede comprar, para el olor a mierda está Yelmo Icaria Barcelona.

jueves, mayo 09, 2013

Como morir pero sin morir

Entonces yo estaba comprando azúcar en un chino, pero compraba un puñadito que me daban en la mano, así que decidía comprar también una bolsa para meterla. Mientras tanto Amigo Actor y yo mirábamos hacia afuera y veíamos (en perspectiva como de piso muy alto) como un edificio se levantaba del suelo, como si una grúa desprendiera un árbol con todo y raíz.

Amigo Actor preguntaba: ¿alguien más ve que el edificio se está elevando del suelo? No estoy loco, ¿no? 

Y la cosa es que todo el mundo lo veía pero a nadie más que a nosotros le parecía raro. 

Luego otro edificio hizo lo mismo y cuando estaba alto, mucho más alto de los edificios más altos, se desintegró en el aire, como si se desmoronara muy rápido. Amiga Actriz, Amigo Actor y yo flipando, claro.

Otro, otro más.

Luego una explosión de un edificio, otra, otra, cada vez más cerca. 

Amigo actor nos mira y nos dice: Ya está, ya está. Entiendo que la cosa va mal.

Amiga Actriz me dice: adéu, nos vemos en otra. Ambos se despiden de mí sonrientes con un gesto de la mano.

Explota el sitio donde estamos, de repente tengo una sensación de calor muy intenso, luz, siento un leve miedo pero alegría porque sé que finalmente voy a trascender y descubrir que pasa tras la muerte y me aterra y me asusta y me llena y me maravilla.

Mi último pensamiento es El Vikingo, pienso: gracias, te amo, nos vemos en otra.

Sé que de alguna manera me estás escuchando o entendiendo. Y entonces salgo como expulsada de mi cuerpo y despierto, en mi cuerpo, con una sensación muy real y muy curiosa al despertar, creo que se parece a morir de verdad. No me pregunten por qué lo sé, pero creo que es algo como ese sueño.

lunes, mayo 06, 2013

La nueva dieta

La semana pasada empecé "nueva vida". Por ahora lo llevo bastante bien, sobre todo soy fan de los desayunos...

Lo que aún no sé compensar es la falta de cafeína en mi cuerpo. No soy de beber café cada mañana, pero seguro que al menos una Coca Cola o un café me bebía al día. Y el té me gusta mucho, pero necesito como siete litros para despertarme. Supongo que tendré que volver a las bayas de Goyi, que creo que más o menos me hicieron efecto hace unos años, cuando me tocó dejar la cafeína.

Y aunque haya momentos del día en que quisiera hartarme una magdalena, media tableta de chocolate y medio litro de gasesosa... me siento tan bien -en general- que tengo ganas de seguir con esta locura.

Divertido será cuando haga el semi-ayuno de arroz rojo. De solo pensarlo me da algo, jiji.


viernes, mayo 03, 2013

Miedos raros


Hoy en la mañana vi una foto de un grupo de tiburones martillo y me acordé de una cosa. Corría el año... diría que 95. Fuimos unos cuantos del Instituto/Colegio de viaje final a Cancún. No me acuerdo cuántos días eran, pero había actividades programadas para cada día. Una de ellas, un paseo en moto acuática para luego hacer snorkel.

Entonces, cuando llegó el momento de subirme en la moto acuática me di cuenta de que... me daba pánico. Miedo no, pánico. Me subí de todas maneras, no había más remedio. Un amigo (que por cierto desde siempre me ha llamado abuela) se ofreció voluntario porque sabía conducir este tipo de aparatos y prometió que no iría más rápido de lo necesario.

Me subí, me abracé al torso de mi amigo como si no existiese el mañana y... y sufrí durante quince o veinte minutos o dos horas o siete, la verdad que lo padecía tanto que ni me acuerdo de cuánto tiempo fue.

En mi defensa, de vuelta una de mis amigas del alma salió volando de la moto en que iba, cayó al agua... y el golpe fue tan fuerte que el resto del viaje anduvo con un morado como del tamaño de un plato en la pierna.

Cuestión que esa misma tarde o al día siguiente fuimos a Isla Mujeres a ver delfines y tiburones. De los delfines ni el rastro, pero en el “vivero” que tenían en el mar había un tiburón gato. Casi nadie quiso meterse a tocarlo, pero yo sí.

Foto tomada de aquí: http://www.flickriver.com/photos/vikingospub/4804681795/



Cayendo la tarde alguien me preguntó que cómo era posible que le tuviera miedo a una moto acuática pero me metiera en el mar con un tiburón. Desde entonces me pregunto cosas parecidas, porque yo a veces le temo a lo más absurdo, o me da vergüenza o reparo. A veces prefiero perderme media hora antes de pedir direcciones. Y cuando hay grandes amenazas, curiosamente, no me da miedo.

Rara que es una.  

miércoles, mayo 01, 2013

Intolerantes del mundo... Uníos

Desde hace unos años lidio con un padecimiento -llamémosle así- que parece extenderse cada vez más: las intolerancias a alimentos. Básicamente descubrí que hay una serie de alimentos que mi estómago no procesa. Esto fue tras dos años, sí dos, de batallar con dolores variados, malestares y pruebas que no llegaban a ninguna conclusión.

Tres veces pasé por urgencias, incluyendo una exótica visita a un hospital noruego y otra a uno costarricense. Tuve que regresar a casa en medio de clases porque no podía más. Todo me caía pesado al comer, y cuando digo todo es todo menos el agua. Ante mis múltiples consultas los doctores acababan rascándose la cabeza porque el nivel de infección que presentaba era demasiado alto para tratarse de una gastroenteritis pero un pelín bajo para apendicitis. Más de una vez surgió la duda de si aquello acabaría en operación, pero sin saber operación de qué. Tras cada susto tocó suero, dieta blanda y a casa sin que nadie pudiera decirme lo que me pasaba hasta la próxima vez.

Sobra decir que la angustia que me generó tampoco ayudaba mucho. Cuestión que me puse a hacer eso tan malo de buscar en internet y acabé haciéndome la prueba de intolerancias... A partir de ahí cambié la dieta y mejoré y cuando recaigo en hábitos pasados vuelven la dolencias.

El propósito de este post no es quejarme sino intentar echar una mano a los intolerantes del mundo... porque uno creería que los síntomas son claros pero es justamente lo contrario, se trata de una dolencia ambigua donde las haya.



Listo los síntomas. Una cosa importante a saber es uno no suele pensar que estén relacionados entre sí y además pueden aparecer hasta unos tres días después de haber ingerido el alimento, por eso cuesta tanto pillar qué pasa y permanecen el tiempo que les da la gana, de hecho yo estuve un mes seguido fatal, sin dar con el motivo:


  • Rinitis, asma, sinusitis
  • Dolor de cabeza parecido a la migraña, mareos (incluso sensación de vértigo)
  • Calambres, debilidad y dolores musculares, dolor en articulaciones
  • Náuseas, vómito, diarrea, estreñimiento, gases, náuseas, cólicos, estómago hinchado, retención de líquidos, sensación de tener el estómago "sucio" o de haber comido demasiado, aún sin que sea el caso
  • Ansiedad, fatiga, depresión
  • Erupciones en la piel


Como pueden ver, es tan amplio el cuadro que uno pasa por revisarse cualquier cosa y puede no acertar. Según leí por ahí, se calcula que un 40% de la población tiene algún tipo de intolerancia, aunque viva con ella y la aguante.

Claramente tener un diagnóstico es de gran ayuda, pero también se convierte en un compromiso fuerte. Entre el Vikingo y yo hacemos un festín... combinando las restricciones de ambos, en mi casa no se debe tomar leche ni quesos de vaca, ni de oveja, ni de cabra. No trigo. No trigo de sémola dura. No cuscús, avena, centeno, cebada, malta, espelta. No cacahuetes, avellanas, almendras. No guisantes, judías rojas ni calabaza. No soja. No huevos. No canela. No almejas, ni cangrejo. Y seguro que me dejo algo.

Lo tremendo de esto es que les reto a coger un paquete de... jamón dulce, por ejemplo. Le agregan soja como potenciador de sabor, trigo y leche para la textura. Así con decenas y decenas de productos que no deberían tener esas otras cosas, pero que han sido modificados hasta la náusea para saciar nuestro paladar cada vez más artificial.

¿Complicado? Claro.

Pero más complicado fue pasarme dos años enferma, os lo digo ya.

Pues eso... a veces vale la pena invertir en lo que el seguro médico público y privado no paga.

lunes, abril 29, 2013

No estaba muerta, andaba de... curranta

Los últimos meses es como si me hubiera pasado enclaustrada escribiendo... bueno, algo más he hecho, pero básicamente le he dado caña al teclado, que es lo que me toca. Por dicha es algo que disfruto muchísimo y que de hecho no cambiaría por nada del mundo, pero es verdad que después de pasarme 4, 5, 6 y más horas en ello, cuando acabo lo último que quiero es escribir más.

Por otra parte hace tiempo que me ronda por la cabeza la duda existencial sobre el mundo cibernético, ya no del blog sino en general, estamos tan acostumbrados al asedio auto-impuesto de internet que a veces como que perdemos la perspectiva...

En fin, que en esas estoy, cada vez más conectada a este mundillo y a la vez renegando de él. Pero creo que vuelvo.





A ver si es verdad.

miércoles, abril 24, 2013

Dioses como Irving


Dioses como Irving

John_Irving

Por Denise Duncan para Literofilia


Recuerdo de adolescente seguir a cantantes típicos de la época. Como cualquier niña de mi edad, tenía a las estrellas del momento algo endiosadas, en un pedestal de poder, belleza y maravilla al que podría acceder puntualmente si el hado estaba de mi parte. Anunciaban que venía X o Y cantante y yo me escapaba del cole si hacía falta para tener un buen sitio en la platea, estar cerca y que -ojalá- mis gritos desaforados llegaran a sus oídos. Iba a conciertos y sí, gritaba toda clase de tonterías al de turno, suspiraba, saltaba, cantaba… como si me fuera la vida en ello, como si aquel encuentro en medio de la masa fuera determinante para mi vida.
Pasaron los años y, hay que decirlo, lo de las aglomeraciones dejó de ser lo mío. Con una honrosa excepción: la literatura. No en vano amo abril, la celebración de Sant Jordi en Barcelona reúne a miles de personas, dándose codazos y empujones para conseguir una firma de sus dioses del Olimpo Literario. Así, me he convertido en una “groupi” diferente, de libros y autores… pero no nos engañemos, me sigo portando como adolescente. Al estrecharle la mano a José Saramago hace unos años me sonrojé, y balbuceé algo absurdo e ininteligible cuando me dijo “Costa Rica… tu país es muy bonito”. Me quedé con ganas de decirle que “bonito” era él. Abracé el libro firmado y volví a casa. Esa noche creo que hasta me costó conciliar el sueño.
Y como quien no quiere la cosa, pasé de conciertos en el Palacio de los Deportes a filas enormes en medio de esta ciudad. Ahora pertenezco a la masa desaforada que hace cola dos horas antes de la apertura de la puerta, ya no para cantar aunque sí para suspirar por autores como John Irving…  escritor septuagenario, inteligente, divertido, mordaz y prolífico al que escuché disertar sobre la vida y la literatura durante una hora y media, en la Biblioteca Jaume Fuster de Barcelona donde vino a presentar su último libro “Personas como yo”, el pasado jueves 11 de abril. Llegué al auditorio nerviosa, a la usanza de mis trece años. ¿Qué le vamos a hacer? ¡El talento y la inteligencia me aflojan las rodillas!

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lunes, febrero 04, 2013

Starbucks fail Plaça Universitat

ACTUALIZACIÓN: Me han respondido de Servicio al Cliente de Starbucks y de manera muy amable. Creo que tienen "derecho de respuesta" aunque no lo pidan, así que copio su mensaje al final del post y le agradezco mucho la atención a la persona que me escribe.


Como cualquiera que me conoce sabe, voy a Starbucks a trabajar varios días a la semana. Suelo pasarme unas cuantas horas ahí, con el ordenador. Normalmente voy al de Sagrada Familia, que durante un tiempo fue deficiente pero ahora ha mejorado exponencialmente. De hecho siempre me tratan bien, siempre me reciben con amabilidad, siempre me siento cómoda. Porque -seamos honestos- uno va al Starbucks para estar tranquilo, en paz, como en un despacho con la ventaja de que te tomas un café, o un té, o un muffin o una galleta. Si quisiera el típico café de me-lo-tomo-y-me-voy-pitando, iría otros bares. De hecho cuando quiero uno de estos, es que voy a otros lugares.

Entonces me pone de muy mala leche cuando el servicio al cliente no se corresponde con mis expectativas del lugar. Como fue el caso.

Martes por la noche. Voy con Cata a un Starbucks que nos queda "de paso". Es el Starbucks de Plaça Universitat, Barcelona. No nos vamos a quedar, pero como tenemos un vale de descuento del 50% sobre las bebidas, aprovechamos para parar 10 minutos. Cata pide y el total que el cajero dice es evidentemente más alto que el normal. Lo sé porque -repito- debo ir unas tres veces a la semana en promedio y casi siempre pedimos lo mismo. Le pregunto al cajero que cuánto dijo que era, repite el monto sin descuento. Le digo que es raro porque ese monto es más alto, que si está seguro que aplicó el descuento... Cata dice que no pasa nada, que después revisamos el tiquet...

Entonces se arma Troya.

La chica que prepara los cafés se acerca y nos dice, con un tono muy borde:

"Bueno, esto es así... Starbucks es caro".


Me dan ganas de decirle de todo, pero me callo. Sé cuánto cuestan las cosas en Starbucks, me sé los precios de la mitad de la carta. Desde que llegué a Barcelona en el 2005 voy a Starbucks con cierta frecuencia. Te puedo decir las promociones del último año y aún lloro de pena por la desaparición del muffin de caramelo/sal que sacaron para celebrar los 10 años en la ciudad. Así que no me jodas... si me apuras, puede que tenga más tiempo de ser clienta que tú de trabajar ahí, así que vamos a relajarnos. Todo eso pienso. Pero me callo. Cata, que es más medida que yo y puede hablar sin despotricar le dice "lo sabemos, somos clientas".

El chico finalmente nos da el ticket, lo revisamos... y resulta que todo el tema es que nos dijo el monto total, no el monto con descuento. Se lo explicamos. Creo que no nos entiende porque me dice "las bebidas embotelladas y la comida no tienen descuento". Le digo que lo sé. Pido mi café, le doy mi vale de descuento y la chica de la barra -que se había despistado un momento- se acerca a preguntarle al cajero que dónde está mi ticket de descuento. Supone que no lo he entregado. Yo me quedo callada, no es mi problema y no pienso punzarme el hígado. El chico le dice que ya lo recogió, ella me prepara el café... doy gracias infinitas porque lo preparan a la vista del cliente...

Aunque anoche me costó dormirme así que a lo mejor su venganza fue simple: me dio café con cafeína a las 7 pm cuando pedí descafeinado.

En todo caso, estimada señorita de Starbucks Plaça Universitat... esa no es manera de tratar a una cliente, menos una que tiene la tarjeta de cliente frecuente... y menos basureando tu propio sitio de trabajo. Sí, será caro, pero si voy es para que precisamente se me trate bien. Ahora, no se preocupe que a partir de hoy, SU Starbucks me parece más caro que ninguno y no volveré. Gracias (por cierto, he enviado un mail a servicio al cliente, para que esté informada).

Y así queda demostrada la importancia de la fidelidad... vuelvo a Starbucks de Sagrada Familia.




Estimada Denise,

Ante todo, agradecerle  que haya contactado con nosotros para transmitirnos su experiencia, ya que ello contribuye a nuestra mejora diaria y sobre todo a tomar las decisiones oportunas para garantizar la mejor de las experiencias a nuestros clientes.

Al mismo tiempo, y en nombre de Starbucks Coffee España, pedirle nuestras más sinceras disculpas por la mala atención recibida en nuestra tienda de Plaça Universitat de Barcelona, ya que no se corresponde con la filosofía de la marca y lamentamos profundamente que se haya quedado con esta mala imagen de la tienda.

En Starbucks, ustedes son nuestra premisa principal y por ello siempre trabajamos intentando dar lo mejor de nosotros mismos para que al final eso se transmita en una excelente atención a todos los clientes que nos visitan cada día, además de disfrutar de nuestras confortables tiendas pensadas siempre para que tenga una auténtica experiencia Starbucks. Es obvio y por lo que nos cuenta que a veces nuestro objetivo no se cumple. Por ello, voy a remitir su e-mail a la Dirección de la marca y al District Manager para que tengan conocimiento de lo ocurrido y lo traten debidamente con la tienda para intentar que no vuelva a suceder.

Además, en Starbucks siempre queremos dar un trato muy personalizado a los clientes, por lo que si no le supone molestia nos gustaría que nos facilitara un teléfono de contacto para poder llamarle y hablar de lo sucedido.

Finalmente y como detalle por esta mala experiencia le vamos a enviar a su domicilio postal (dato que tenemos en nuestra base de datos de Club Vips al ser usted socio Oro del mismo) unas invitaciones para que pueda canjearlas por su bebida favorita en cualquier tienda Starbucks de España.

Esperamos que lo ocurrido haya sido algo totalmente excepcional y esperamos poder seguir contando con el privilegio de tenerle como cliente.

Quedo a su disposición para cualquier comentario que desee hacernos llegar.

Un cordial saludo y que tenga un buen día



viernes, febrero 01, 2013

✉ ✉ ✉ ✉ Y CUANDO UNO CREE QUE SE HA LLEGADO AL TOPE ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ 
✉ ✉ ✉ ✉ ✉ PARECE QUE HAY UNO AÚN PEOR ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ ✉ 
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miércoles, enero 30, 2013

Mi amor televisivo... Ellen

Hay gente que es graciosa pero se esfuerza.

Hay gente que es buena haciendo preguntas y conduciendo un programa, pero no es graciosa y le falta ingenio.

Luego hay hay gente que es graciosa, buena conduciendo un programa, haciendo preguntas y es "witty" y aunque "ingenioso" sea la traducción, no lo resume. Ellen DeGeneres es una de esas personas. Yo honestamente la amo, veo cuanto puedo en el canal de youtube en que suben cosas del programa. Prefiero su sentido del humor al de muchos otros como Jay Leno, David Letterman o Jimmy Kimmel. No hay nadie como Ellen. Algún día iré al programa a decírselo, jejeje.

El sábado me desvelé, para variar... lo malo es que me puse a ver videos en youtube de Ellen. Y encontré este. Todo iba bien hasta los últimos minutos, aguanté tanto la risa que finalmente salió explosiva a las 3:30 am. El vikingo se despertó, sobresaltado, pensando que me había pasado algo. Lo único que pude hacer fue echarle la culpa a Ellen y sus ocurrencias.

Hay que verlo hasta el final, es buenísimo para subir el ánimo, lo prometo.




Menos mal que creo que su programa no lo pasan por cable, y si lo pasan... menos mal que no tenemos cable.


lunes, enero 28, 2013

Humor, mejor eso.

Dos chistes y una foto curiosa que sacamos el fin de semana. Porque sin humor... no aguantamos esto.




Se abre el telón, aparece Rajoy. 
Se cierra el telón...

Se cierra el teatro, el centro de salud, el centro cívico...





-¿Estudias o trabajas?
-Soy español.
-Hostia, perdona




Y la foto, que resume como está la cosa...

Foto de Catalina Calvo

viernes, enero 25, 2013

Fan fiction, plagio, homenaje

Me acabo de enterar de que un fan de Harry Potter escribió un "spin-off". Pasa unos años después de que acaba la saga de la Rowling pero... uy, como que se parece mucho. Resulta que un programador de webs se inventó a un hijo de Harry y ha escrito -hasta ahora- dos novelas sobre él.

Lo que resulta raro/curioso/sospechoso es que usa términos y personajes creados por Rowling. Las portadas son curiosamente similares... de entrada parecería que tendría que haberle caído una demanda del copón.




Pero no. No le caído ninguna demanda, de hecho.

Primero, al parecer él no lucra* con la serie. No puede ser publicada, supongo que es parte del acuerdo con la máquina legal de la autora. Segundo, se supone que aunque parte del mismo punto, se separa de él y crea su propia historia. Y tercero, a Rowling al final le vale un reverendo pepinazo lo que haga, porque... bueno, porque ella es la Rowling.

Ahora, me paro a pensar y no sé si es tan lógico porque lo de *no lucrar es relativo. En amazon aparecen 3 libros de su autoría publicados después de que sacó a la luz su fan-libro. Antes ni uno. ¿Descubrió un talento? Eso seguro. Pero también ha usado un bien intelectual ajeno como catapulta.

En fin, que estoy pensando escribir en una novela que empieza así:


Muchos años después, frente al jurado de enjuiciamiento, la coronela Aureliana Maldía había de recordar aquella mañana remota en que su tía la llevó a conocer el mar. Lamondo era entonces una ciudad de doce rascacielos de cemento y metal construidos a la orilla de un estanque de aguas sucias que se precipitaban por un lecho de troncos pulidos, negros y enormes como larvas prehistóricas.


¿A que me ha quedado muy bien el primer párrafo?



miércoles, enero 23, 2013

Pelota picada, chingo piringo...

Una de las cosas a las que me he acostumbrado muy pero muy lento es la desnudez en este país. A ver, estudié teatro en Costa Rica, así que algo de cuerpos medio desnudos se ven, pero no con la tranquilidad española.

Por ejemplo... el gimnasio. Resulta que allá hay vestidores individuales en piscinas y gimnasios. Aunque se tarde el triple, la gente hace cola para entrar en uno y ahí, en la intimidad de su metro cuadrado, se cambia de ropa. Las pocas veces que vi a alguien medio desnudo en el gimnasio iba acompañada de miradas reprobadoras de las demás. Aquí, en cambio, si alguien pretende vestirse en privado se jodió, porque hay banquetas, taquillas para la ropa y listo. Lo más curioso es que a nadie parece molestarle ni mucho menos.

Luego la playa. Sí, habrá alguna playa nudista por allá, pero es la excepción y no la regla. Y el topless no se atreve a hacerlo nadie en su sano juicio. Las pocas veces que he visto gente haciendo topless es porque estábamos en una playa recóndita entre semana, en temporada baja. Y esto sigue siendo una excepción, el 99.9% de mis amigas enseñan lo que el bikini deje al aire.

No digo que nuestra forma esté mal y la española esté bien, pero sí creo que he llegado a entender que la naturalidad del cuerpo es hermosa. Si enseñáramos más, probablemente no pasarían cosas como estas. La resumo: en un centro comercial -hasta hace unos días- "invitaban" a las madres a dar de mamar a sus hijos/as en zonas de lactancia, porque no está bien visto hacerlo en zonas comunes. No pienso entrar en la discusión de qué es pudor y cuándo hay que aplicarlo, porque justamente lo que digo es que el pudor es una construcción social que podemos refrendar o no. Otra cosa es la educación...

Uy, me desvío del tema. Decía que aquí la gente no tiene problemas en andar en pelota picada, chingo piringo, y tiene cierta gracia. Lástima que prohibieran la desnudez, que estaba aceptada hasta hace poco en la ciudad, porque hasta echo de menos a este señor, que solía verlo de vez en cuando caminando por el centro.


Jajajaja.

Por cierto, la foto la pongo censurada porque sigo siendo del país del pudor. Y no quiero que me denuncien por contenido sospechoso.

Y así, uno se acostumbra a ver cuerpos. Al principio yo hacía malabares en el gimnasio y no sabía para dónde mirar en la playa, para qué nos vamos a engañar... pero con el paso de los meses me relajo cada vez más.

Estoy a un tris de hacer topless.

No.

No, tanto no.

lunes, enero 21, 2013

Oferta de trabajo


Cosas curiosas que me llegan al correo:
ESTIMADA DENISE: "Soy gerente de Public Relationships , de una compania internacional muy grande! Ahora en este preciso instante vamos en la busqueda de personal empleados en Espana.
Nuestra empresa se dedica a implementar la ultima tecnologia y las decisiones sencillas En este preciso instante tenemos muchos clientes que se ubican en la region de Europa,pero no tubimos la posibilidad de cubrir los, precisamente son los clientes pequenos.
Nosotros le otorgamos cursos basicos, buen saldo y vacaciones pagadas. El pago del laburo en el trabajo de medio dia es de 2 a 3mil euros" (y un largo ETC similar)

ESTIMADA EMPRESA PUBLIC RELATIONSHIPS: Me escama para empezar que su dirección no sea oficial de la empresa sino de hotmail. Lo segundo que me pone a pensar en lo real de la oferta es que, si presta atención a su email, hay muchas faltas ortográficas: se escribe "compañía", "búsqueda", "España", "última", "tecnología", "región", "tuvimos", "pequeños" por nombrar algunas. ¡En castellano se usan signos de admiración al inicio de la frase! Lo de "en este preciso instante" puede cambiarse por otra frase para evitar repeticiones poco elegantes. En fin, estimada empresa de public relationships, me sabe mal pero tengo que decirle que la redacción en general es bastante mediocre por no decir mala, las frases suenan forzadas y son ambiguas.

Siendo, como dice usted, parte de una compañía de relaciones públicas, me extraña que no sepan puntuar o que no tengan alguien que se encargue... digo yo que la imagen de su propia empresa puede quedar en entredicho con estos fallos. Si una empresa como la suya defiende la imagen de otros, debería -para empezar- intentar tener una propia que pueda calificarse como impecable. Por otra parte, la palabra correcta es "salario" y no "saldo" y el uso de "laburo" le da un toque que si bien queda simpaticón,  también le da un aire que en este preciso instante parece excesivamente informal. Y no soy argentina, en todo caso tendría que haberme hablado de "brete" o de "curro".

Gracias por su misiva... pero sospecho que el salario que me ofrece es una patrañita. Con mucho gusto le hago las correcciones ortográficas por un pago más realista con el compromiso de aumentar el interés de empleados potenciales, sobre todo los que no se dejan timar fácilmente. Si no les interesa contratarme, de todas maneras le regalo el consejo: empiecen por contratar alguien que sepa escribir una carta formal.

Atte. Yo

viernes, enero 18, 2013

Me gusta...


Denise dirigiendo, dibujo de mi amiga Paula Calvo...
Me gusta la primavera. 
Las fresas con naranja, las cerezas, las uvas sin pepitas; los helados de dulce de leche.
Y los viejos tiempos.
Los abrazos de mi madre.
I feel good a todo volumen.
Los ataques de risa injustificados.
Me gustan las mariposas azules.
Las pestañas largas que recuerdo, una voz ronca, unas manos grandes y esas pecas.
Me gustan las palabras, sobre todo las traviesas: concupiscencia, bochinche, ploramiques.
Me gusta el cerebro insondable de mi padre cuando discurre sobre teología o literatura.
Los gatos pequeños cuando se estiran.
Los niños menores de siete años
Los perros que saben que son perros, y no personas.
El descaro, el atrevimiento.
La soledad escogida.
El número siete.
Llegar a casa después de un viaje.
El cansancio post ejercicio, cualquier clase de ejercicio.
Me gusta Bruselas casi tanto como Oslo.
Me gusta suspirar, bostezar estornudar.
Lo dulce, me gusta.
Los jinetes del Apocalipsis, las profecías de Nostradamus, las teorías de la conspiración.
Abrazarme a su espalda; acurrucarme en su pecho.
Y las cosquillas de mariposa y los besos de esquimal.
Comer, tal vez me gusta demasiado. Comer sin hambre. Comer con las manos. Y chuparme los dedos. Y lavarme las manos.
Los personajes de novela que salen de las páginas para tomarse un café.
Me gusta llorar en las obras de teatro.
Me gusta escribir.
Y El cumpleaños de Chagall, y El vampiro de Munch. Los fiordos.
Coser. Me gusta coser muñecos de fieltro.
Los pendientes de colores.
Ver dormir a la gente.
Me gusta abrir regalos.
El cordero al horno una vez al año. Cocinar cinco platos aunque tenga que congelar tres.
El olor del desinfectante. El olor a pintura.
La albahaca, el romero, la hierba buena y el perejil.
El cheesecake new york style.
Me gusta sacar fotos.
Me gustaba tener razón. 
Ahora me gusta no tenerla. 
Me gustan Kahlo, Pizarnik y Kane... ha de ser que me gusta la "K".
El mar en invierno.
Los lápices de colores.
Hacer payasadas como niña pequeña.
Mi cama con sábanas recién lavadas.
Gala de Dalí.
Oír cantar al Vikingo. Cantar en la ducha. Que me mimen.
Los monitos tití.
Me gusta dormir.
Me gusta revisar precios de pisos nuevos como si tuviera una cuenta con millones en el banco.
Comprar los libros de tres en tres.O de cuatro en cuatro.
Mafalda y Susanita y Libertad y Manolito. También Felipe y Guille.
Las conversaciones de madrugada con amigos.
El Parc Güell en otoño.
Las canciones tristes de Silvio Rodríguez. 
Las canciones nostálgicas de Guadalupe Urbina.
Pensar, inventar, crear, imaginar. 
Hacer compras de supermercado.
La gente inteligente. Me gusta aprender.
Que me cuenten cuentos antes de dormir.
Imitar el acento de los dobladores españoles.
Las gambas y el cangrejo aunque no puedo comerlo.
Los cronopios. Las famas... no, no las famas.
Las historias de fantasmas cuando se va la luz.
Recibir cartas por correo.
El olor de los lirios.
Las sonrisas.
El té.

miércoles, enero 16, 2013

Veronese, Incendis, Pi, Lizarán


La semana fue de ficciones, ficciones y de alguna realidad menos agradable.


Foto del Teatre Lliure

Para empezar fui a ver un montaje de “La gaviota” (Chéjov) por Daniel Veronese, y debo ser la única (o de las pocas) que no salió contenta de la sala. Los actores son buenos, el director ha hecho cosas que a mí me parecen maravillosas antes, el texto es un clásico de los bien escritos... ¿qué salió mal? No tengo ni idea, pero sé que no me creí nada, todo me pareció bastante forzado y los actores -me daba la sensación- estaban como a medio gas. Salí desubicada, la verdad que me esperaba totalmente otra cosa.




Foto del Teatro Romea
Al día siguiente vi “Incendis” de Wajdi Mouawad, dirigido por Oriol Broggi. Aunque los primeros veinte minutos me costaron (cosas de “entrar” por el género de la obra), la verdad que las tres horas restantes me parecieron espectaculares. En esto coincido con la mayoría de espectadores, que han llenado el Teatro Romea hasta los topes en dos temporadas. Enormes Clara Segura y Julio Manrique, aunque el elenco en general es bastante espectacular. Salí impresionada y agradecida, es precioso cuando uno ve algo tan bien hecho. Si acaso hicieran gira por España, hacedme el favor de ir a verla.





Al día siguiente vi “La Vida de Pi” basada en la novela de Yann Martel. Es uno de los libros que más he disfrutado, así que iba con cierta reticencia a ver la adaptación. Sobre todo tras el chasco de la semana pasado con aquel otro bodrio en 3D. Pero... a los pocos minutos de empezar la cinta, ya estaba atrapada. Doble mérito porque ya me sabía la historia, pero la disfruté como si me viniera de nuevas. Amo a Richard Parker, aunque no sea un amigo.



Foto de David Ruano (TNC)

Y la semana acabó con una mala noticia para el teatro de este país. Murió Anna Lizarán. Si no saben quién es, les pido que por favor lean esto o esto o esto. Yo la vi dos o tres veces sobre el escenario, no más, pero siempre me pareció una mujer arrolladora, talentosa, entregada... una pena grande grande que haya muerto una de las actrices teatrales más fantásticas que he visto. Pero también agradezco haber podido verla, habrá tanta gente de la profesión que jamás lo hará... y la Lizarán era muy grande.

O sea que no puedo recomendarles ver lo de Veronese porque eran pocos días y porque este... pues no, no lo hubiese recomendado. Tampoco puedo recomendar Incendis porque acabó el fin de semana, y a la Anna... habrá que esperar que se encarne y crezca y decida volver a las tablas. Bueno, pueden ver Vida de Pi.  

lunes, enero 14, 2013

Leer cinco libros a la vez...

...Es una locura. ¿Dónde quedó aquella lectora ordenada que jamás empezaba uno sin acabar otro?
Cinco. O seis. O siete, he perdido la cuenta...
Uf.

viernes, enero 11, 2013

De teléfonos mega guays

¿En qué momento nos complicamos tanto la vida?

Corría el año 98. Yo tenía un novio con el que nos comunicábamos de dos maneras: en vivo o por el teléfono público. Bueno, miento, los dos teníamos un buscapersonas que actuaba como recordatorio de llámame. Y el teléfono público sólo lo usábamos para cosas urgentes.

Sigamos atrás en el tiempo. Yo fui al instituto, a uno bastante lejano a mi casa, y nunca tuve teléfono móvil. Nadie lo tenía. Tembló, hubo ventiscas y casi huracanes, hubo hasta inundaciones alguna vez... y ni mis padres ni yo tuvimos la necesidad de estar comunicados. Se confiaba en el centro educativo y su capacidad de protegernos.

Sigamos atrás en el tiempo. Durante muchos muchos años en mi casa sólo había teléfono de ese de disco, el de la ruedita con números. La llegada del teléfono en el que se pulsan las teclas ya fue todo un acontecimiento, ni hablemos de los inalámbricos.

Yo honestamente no soy muy amiga del teléfono. Supongo que por eso tengo un aparato que tendría que ser smartphone pero es más bien bastante tonto. Tendría que tener prestaciones que me hagan la vida más sencilla, pero en realidad el ladrillo del año 89 me iba mejor.



Tal vez por eso estoy pensando que en el fondo, o se deja uno llevar y cae en la tentación de tener un teléfono de última generación, realmente bueno... o más vale directamente no tener móvil.

Y en esas estoy.

Para peores mi cackberry está en proceso de desmontaje, esta tarde he descubierto que tiene un buen trozo de carátula a punto de caérsele.

Y si digo la verdad, tampoco me sabe tan mal que muera, porque es un teléfono bastante malo.

Pero pienso que gastarme La Pasta de Tu Vida sea la mejor opción, pero para teléfonos malos... el que tengo.

Y en esas estoy.

miércoles, enero 09, 2013

No se trata de tener razón


Hasta hace unos meses no entendía que intentar tener razón va contra la calma y la paz mental. Es decir, que la necesidad de demostrar que uno sabe y el tratar de convencer a los demás... es inútil y responde a un grito de atención del ego.

Todo esto viene a cuento de que hace unos días me di cuenta de que incluso cuando uno piensa que tiene la razón, lo constructivo es ni siquiera pensar en ello. Dejar de medir lo que se dice en términos de razones... ay... que me lío más que una persiana... quiero decir que, por ejemplo:

Amiga-que-ahora-no-te-quiere te hace saber, de manera indirecta -eso sí- que ya no te quiere. Tras un tiempo medianamente largo consigues comunicarte con ella, de manera indirecta -eso sí-. Resulta que al parecer tú hiciste una-cosa-espantosa-y-grosera-casi-innombrable. Tú no lo recuerdas. Te suena muy raro, te parece ajeno a ti. PAUSA. ¿Qué más da? Da igual quien tenga razón... el caso objetivo es que Amiga-que-ahora-no-te-quiere lleva un rato largo dolorida contigo, resentida y herida. La razón no la tiene nadie, hay un sentimiento muy concreto y una reacción de su parte. Pides disculpas y listo. Para Amiga-que-ahora-no-te-quiere siempre serás esa mala persona, entonces no hay caso en discutir nada ni intentar convencerla de nada.

Amiga-ay-como-hemos-cambiado ha desaparecido de tu mapa. Hace tiempo, además. En el fondo de tu corazón sabes que no le debes nada. Sabes que el único error fue la sensibilidad extrema -de ambas- y la sinceridad -la tuya- cuando Amiga-ay-como-hemos-cambiado no quería (ni podía) entender. Sabes que el detonante del alejamiento no fue tu culpa, de hecho fue algo que Amiga-ay-como-hemos-cambiado hizo y que incluso cuando intentaste... PAUSA. ¿Qué más da? Da igual quien tuviera razón... el caso objetivo es que Amiga-ay-como-hemos-cambiado tomó una decisión... y a ti te queda pensar en lo que fue bonito de tantos años y dejar ir. A ella, a la situación, a tu anclaje con ese momento.

Todo esto es bastante sencillo porque ya pasó. Lo que cuesta es aplicarlo en el presente, incluso en cosas pequeñas... ¿por qué nos programaron tan tozudos?

lunes, enero 07, 2013

[Película] El Hobbit... pues... no...


Cosas que uno hace por amor: pasarse tres horas en el cine... viendo una de las películas más aburridas del planeta.



No, ni el 3D la salva.



Lo único maravilloso son las escenas con Gollum /Smeagol... qué grande bicho. Lo adoro. Por lo demás, dos entradas, cena, chuches... por 20 minutos buenos de cine.





Honestamente creo que Peter Jackson es un director mediocre con buena suerte y muchos recursos. Y entonces, el resultado es bastante mediocre. Hay líneas de diálogo que dan ganas de arrancarle la cabeza de lo mal escritas que están, nivel sub principiante. Las localizaciones preciosas, mucho bicho y poca chicha.

Ahora, hay que aceptar que no debí haber ido... no es mi estilo de cine (aunque con El Señor de los Anillos aguanté el tipo... menos en la 3 que quería desintegrarme y desaparecer del cine), pero el vikingo se moría de las ganas de verla... y también acepto que gracias a esta película, el vikingo se ha comprometido a dejarme escoger las siguientes 4 que veamos, así que al final el saldo es positivo.



viernes, enero 04, 2013

Esas cosas raras que pasan: avistamiento de fin de año

He visto cosas raras volando en esta vida. No es la primera vez que me pasa, pero sí la primera en que es taaaan raro que aún le doy vueltas. Sé que habrá quien no me crea, sé que habrá quien le busque explicaciones humanas y racionales. Pero... yo sé que vi algo raro.

31 de diciembre. 1 de enero, en realidad, porque ya es de madrugada. Estamos en el balcón Cata, El Vikingo y yo. El Vikingo, que aclaro que es bastante descreído para todo, nos señala el cielo... ¿qué es eso?

Levanto la vista y veo lo siguiente: un objeto volando, bastante más grande que un avión. O vuela muy cerca o es muy grande, pero la proporción es rara. No es una luz indefinida, es un objeto. Parece redondo, la figura está bien delineada como por un banda gruesa, de un color naranja-rojizo muy intenso. Va bastante más rápido que un avión, en una dirección muy concreta, en línea recta pero fuera del trayecto habitual de cualquier otra cosa que pase volando por los cielos cercanos a casa.

¿Qué es eso?

¡Cata, andá a traer tu cámara! Cata me dice que no, que quiere verlo y que lo vea, nada más. Es un momento raro, porque sé que no es algo "normal". Repito que me muero por tener una cámara, pero también es cierto que no quiero perderme ni un segundo. Así que sigo viendo esa cosa que vuela y seguimos sin saber qué es.

¿Qué es eso? El vikingo ya ha descartado todos los objetos voladores habituales... él que es descreído no se atreve a decir lo que a Cata y a mí nos pasa por la cabeza.

Cuando vuela por delante nuestro me estiro por fuera del balcón porque quiero seguir viéndolo, me queda por encima de la cabeza, es decir... lo veo por debajo. Entonces descubro que dentro del círculo hay otro círculo más, delineado con una banda naranja-rojiza, perfecto y más pequeño. Y el objeto, confirmo también entonces, es perfectamente redondo.

Desaparece.

Y como pienso que no somos el centro del cosmos... pues, bienvenidos.


Sí. Creo que es lo que sospechamos.

La historia me va a durar días y días, fue muy sorprendente.

miércoles, enero 02, 2013

Balance literario 2012


Tenía la sensación de que había leído muchos libros de media calificación durante el 2012. Así que me puse a hacer la lista (los asteriscos figura que son estrellas...) y confirmé la sospecha. De hecho, el único libro de ficción que me parece impecable es “The help”, de Kathryn Stockett y estoy haciendo trampa porque me lo leí a finales del 2011, pero como hice la crítica en el 2012, lo incluyo. O sea que la ficción me quedó debiendo algo de cinco estrellas. Tampoco creo que los de 4 estrellas y 3 sean malos, supongo que es una buena calificación, pero definitivamente no ha sido el año de las grandes obras de la literatura universal. De todas maneras, queda claro que tener un kindle aumenta el ritmo de lectura: la mitad de estos libros los leí en versión digital.

Y aquí viene la lista...

*****
The help, de Kathryn Stockett
La vida secreta de grandes autores, de Robert Schnakenberg

****
In one person, de John Irving
Los juegos del hambre, de Suzanne Collins
El abuelo que saltó por la ventana y se largó, de Jonas Jonasson
En llamas, (Los Juegos de Hambre 2) de Suzanne Collins
Misery, de Stephen King
El señor de las moscas, de William Golding
Granja de animales, de George Orwell
El guardián entre el centeno, de J.D. Salinger
Manolito Gafotas, de Elvira Lindo

***
1Q84, de Haruki Murakami
La cena, de Herman Koch
Sinsajo (Los Juegos de Hambre 3) de Suzanne Collins
Mi hermana vive sobre la repisa de la chimenea, de Annabel Pitcher
So much for that, de Lionel Shriver
El planeta de los simios, de Pierre Boulle
El amor dura tres años, de Frédéric Beigbeder (relectura)
El pibe que arruinaba las fotos, de Hernán Casciari
Cada siete olas, de Daniel Glattauer
Pobre Manolito, de Elvira Lindo
Pide y se te concederá, de Esther y Jerry Hicks

**
The leftovers, de Tom Perrotta
The marriage plot, de Jeffrey Eugenides
Fool, de Christopher Moore
Bridget Jones's Diary, de Helen Fielding
Ni Eva ni Adán, de Amélie Nothomb
La sociedad literaria y el pastel de piel de patata de Guernsey, de Mary Ann Shaffer
Contra el viento del norte, de Daniel Glattauer
Amar con los ojos abiertos, de Jorge Bucay

*
Fly me to the moon, de Alyson Noel
You're a writer, de Jeff Goins


Los que aún tengo a medio camino (sí, según yo estoy leyendo los cinco...)

En la corte del lobo, de Hillary Mantel
El tiempo entre costuras, de María Dueñas
Yo confieso, de Jaume Cabré
The handmaid's tale, de Margaret Atwood
La mujer de tu prójimo, de Guy Talese

¿Cómo les fue con la lectura este año?
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