miércoles, febrero 28, 2007

.


Si no sintiera que tengo que pedirme permiso para estar triste,
talvez habría una lágrima lista para desembarcar.


Foto: Macduff Everton

10 comentarios:

  1. y sin duda, volvera a pasar, y habra que pensar en solicitar otro permiso.

    buen blog, saludos

    ResponderEliminar
  2. Hay momentos para tener la tristeza a la deriva y otros para dejarla atracar y bajarse a tierra a hacer lo que tenga que hacer. Porque una cosa es una cosa y otra cosa es otra cosa :-)

    ResponderEliminar
  3. A veces hay que dejarla salir aunque no tenga permiso... Así hasta pueda lavar más.

    Un abrazo Deni!

    ResponderEliminar
  4. mmmm... déjala partir...

    ResponderEliminar
  5. Es mejor pedir perdón que pedir permiso.

    ResponderEliminar
  6. Perfecto.
    Todos necesitamos muchas veces un lugar propio oscuro y privado para ir a lamernos las heridas.
    Cluster One.

    ResponderEliminar
  7. :-)
    Besos... y abrazos, un poco menos tristes!

    ResponderEliminar
  8. uy...
    otra vez mutis! :(

    Abrazos

    ResponderEliminar
  9. a mi me pasa que las acumulo todas y un día salen sin pedir permiso

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...