Cada quien tiene sus fetiches. Hay quien pagaría 600 dólares por un libro autografiado de Harry Potter (como acabo de ver en ebay), otros que corren a las tiendas a comprar la Barbie edición limitada y la mantienen en la caja, impoluta, hasta que pasan muchos años y se multiplica por veinte su precio inicial y claro, del otro lado, hay un/a amante de estas bichas dispuesto/a a gastarse sus ahorros.
Un primo de los primos de Fernando tiene en su casa una habitación repleta de juguetillos: figuras, muñecos, tarjetas, juegos… todo expuesto pero nada es realmente para jugar, se trata simplemente de su fetiche de hombre casado y con dos hijos (que por cierto deben sufrir porque no los dejan tocar nadita). El mundo de la fantasía y la ciencia ficción le obsesiona y fascina a un punto extremo. Calculo que con lo que él se ha gastado en muñecos, yo podría comprarme un coche. Exagero, seguramente, pero es impresionante.
Yo jamás he sido de gastarme pequeñas ni grandes fortunas en objetos de valor simbólico. Lo más cerca que llego es a tener colecciones… una de tarjetas postales y la de mis pendientes/aretes, pero creo que el par de aretes más caro de los que tengo (que no haya sido un regalo) me habrá costado 10 euros ó 15. Y las tarjetas ni se diga, una “muy cara” puede costarme 1 euro.
Por otra parte, me llama la atención el valor que le damos a las cosas. Una firma puede valer miles, un objeto viejo pero cuidado de repente deja su estatus de “basura” y la tendencia es a volver a lo pasado. Para muestra, los discos de vinilo. Me encanta el sonido sucio de la aguja encima del disco, pero me niego a pagar 200 euros por un tocadiscos de estos, si hace menos de diez años seguro que tiramos uno a la basura porque ya nadie atendía desperfectos técnicos de "esos aparatos pasados de moda".
Me pregunto si es una cosa de personalidad… o de dinero. Es decir, si yo tuviera mucha mucha mucha pasta… ¿sería capaz de pagar bestialidades por cosas que me gustan? Y sobre todo ¿cuál sería mi fetiche?
ps. tengo que sacarle una foto a MIS aretes, mañana lo hago.
Un primo de los primos de Fernando tiene en su casa una habitación repleta de juguetillos: figuras, muñecos, tarjetas, juegos… todo expuesto pero nada es realmente para jugar, se trata simplemente de su fetiche de hombre casado y con dos hijos (que por cierto deben sufrir porque no los dejan tocar nadita). El mundo de la fantasía y la ciencia ficción le obsesiona y fascina a un punto extremo. Calculo que con lo que él se ha gastado en muñecos, yo podría comprarme un coche. Exagero, seguramente, pero es impresionante.
Yo jamás he sido de gastarme pequeñas ni grandes fortunas en objetos de valor simbólico. Lo más cerca que llego es a tener colecciones… una de tarjetas postales y la de mis pendientes/aretes, pero creo que el par de aretes más caro de los que tengo (que no haya sido un regalo) me habrá costado 10 euros ó 15. Y las tarjetas ni se diga, una “muy cara” puede costarme 1 euro.
Por otra parte, me llama la atención el valor que le damos a las cosas. Una firma puede valer miles, un objeto viejo pero cuidado de repente deja su estatus de “basura” y la tendencia es a volver a lo pasado. Para muestra, los discos de vinilo. Me encanta el sonido sucio de la aguja encima del disco, pero me niego a pagar 200 euros por un tocadiscos de estos, si hace menos de diez años seguro que tiramos uno a la basura porque ya nadie atendía desperfectos técnicos de "esos aparatos pasados de moda".
Me pregunto si es una cosa de personalidad… o de dinero. Es decir, si yo tuviera mucha mucha mucha pasta… ¿sería capaz de pagar bestialidades por cosas que me gustan? Y sobre todo ¿cuál sería mi fetiche?
ps. tengo que sacarle una foto a MIS aretes, mañana lo hago.
La verdad me pusiste a pensar y no, no tengo ningún fetiche.. o por lo menos no lo he descubierto aún. No es tanto por el dinero, sino que acumular tantas cosas en mi casa me desespera, además me gusta cambiar mucho, y tener una colección de muñecos, aretes, colonias o cualquier otra cosa que sé que el día de mañana pasarán de moda no me convence.... saludos
ResponderEliminarYo sí que tengo personalidad de coleccionista...me encanta atesorar recuerdos y me encantan las cosas "antiguas". Me arrepiento, me arrepiento de haber cedido a un instinto generoso y haber regalado mis muñecas de papel, sobre todo porque había unas que habían sido de mi prima (que ahora tiene 40 añitos, te imaginarás la calidad de muñecas "sesenteras" que podían ser)... De una cosa que no pienso desahacerme son de los Legos, por ejemplo. O de las revistas de Pato Donald que eran de mi mamá.
ResponderEliminarEso sí, nada de guardar las cosas...hay que usarlas! Y tampoco gastar desmedidamente.
¿Te conté que me compré un tarot de gatos? Ya te lo enseñaré ;)
Lanas. Telas. Gadgets para tejido. En realidad creo que me he salvado de declarar cualquiera de esas un fetiche sencillamente porque el gasto de dinero se reparte en mis múltiples intereses.
ResponderEliminarPero después de gastar 65 USD en lanas en mi último viaje... creo que ese no se salva.
PUES NO SE NO SE... CREO QUE MI FETICHE SON LOS ZAPATOS Y BOLSOS!!!!!
ResponderEliminarPERO TAMPOCO PUEDO VOLVERME LOCA, LOS SUELDOS D EHOY EN DIA N OME DEJAN SACAR LA CARRIE BRADSHAW QUE VIVE EN MI...
Yo los zapatos... ufff son mi perdición los tengo de todos los colores y de todas las clases y aún así sigo comprando, soy una especie de Sarah Jessica Parker :)
ResponderEliminarBesitos.
CRISMAR: o sea que sos más práctica... pues de la que te salvas, ser de las "acumuladoras" no es tan divertido. Y bueno, es que las colecciones tienen como función que las cosas vayan pasando de moda, pero adquieren otro valor.
ResponderEliminarMURASAKI: lo peor en el caso de las muñecas es que me corto la oreja si no terminaron en la basura tras unos cuantos usos, o destrozadas! Tarot de gatos??? Ahhhh, qué belleza!
MEDEA. la ventaja es que las usás, así que técnicamente -como mis aretes- tenés una debilidad por esas cosas. Por cierto, no he podido ir a la tienda de lanas, pero después de tu inversión supongo que no es taaan necesario! :-)
CELES: ya podrías haber escogido uno menos caro... sobre todo xq si sos como mi hermana (otra Carrie...) seguro que te gustan los zapatos caros :-P
MELEOBRO: jajajja, creo que eso haría mi novio, en su caso sería probablemente sólo los de cuerda. Es una idea muy tuanis!
JESSIKA: me parece que tengo muchas zapateras por aquí :-) A mí nunca me ha dado por ahí, aunque últimamente les pongo un poquito más de atención.
Ayyys...yo no sé si seré fetichiste, pero me encanta coleccionar cosas...:S No me gasto muchísimo dinero (tampoco lo tengo, jejeje), pero me gusta ahorrar para gastármelo en cosas que me gustan, como el manga (una afición muy cara, la verdad...) Pero espero no llegar nunca al punto de gastarme millonadas en ello.
ResponderEliminarYo siempre lo he pensado... Soy como fetichista en la distancia, porque si tueviera dinero como para tirarlo, me compraba rollos de películas para verlas en casa (tengo un proyector, pero no tengo ninguna peli, y siempre pienso: "este año me compro alguna vieja para ver", pero solo la venden en sitios especiales y son taaan caras). ¡Va ser que al final lo unico que me da la sensatez es la pobreza!
ResponderEliminarDenise, que sepas que no exagerabas en el post, el primo tiene machanguitos por valor de más de un coche.
ResponderEliminarCVALDA: lo que pasa con el manga es que está de moda, tú resiste, en unos años seréis menos y bajarán los precios ;-)
ResponderEliminarSUPERFLICKA: wow, qué genial que tengas un proyector, si yo tuviera uno seguro que estaría viendo de dónde sacar dinero para las pelis... ¡me encanta tu fetiche, aunque por ahora sea a la distancia!
FERNAN: y yo que pensé que era una mega exageración... qué horroooor. Bueno, me hace gracia porque es evidente que el pobre se aburre con tanto dinerillo. Yo seguro lo gastaría en FNAC, la Casa del Libro y La central... ;-)
Soy muy fetichista, en el sentido de dar valor a objetos que relamente no lo tienen.
ResponderEliminarPor ejemplo: me gustan las ediciones de discos curradas y necesito tocarlas y poseerlas auqnue me hay descargado el disco de emule. Sobre todo de mis grupos favoritos. Par ami la presentación es tan importante como el contenido.
Los libros, necesito tenerlos. Es más barat sacrlos de la biblioteca que comprarlos pero me gusta verlos y tocarlos en las estanterias repletas.
Soy fetichista de los libros antiguos aunque no pueda leerlos porque esten escritos en idiomas que no conozco.
Lo que no creo es que fuese capaz de gastarme mucho dinero en algo, poor mucho que me gustase.
Te tengo una invitación especial, hoy, precisamente hoy. Ha muerto el sueco Ingmar Bergman. He abierto un nicho (post) velatorio en mi blog. Si Bergman te significa algo, me gustaría que vinieras y dejaras una frase ahí. Puedes extender esta invitación a tus amistades blogueras. Gracias.
ResponderEliminarZapatos. Sin un solo segundo de duda.
ResponderEliminarColecciono canciones con tablaturas. Me gustan los libros de filosofía, pero usados, de compra-venta.Además, jarras y camisetas de futbol...
ResponderEliminarUn abrazo Denise, estoy de vuelta, me alegra volver a la hospitalidad de tu anónimo pensamiento.
ResponderEliminarFANMA: jiji, en tí lo sabía, estás rodeado de objetos simbólicos. Me pasa lo mismo que a tí con los libros, por eso tampoco me fascina que me presten libros, prefiero que me los recomienden y ya me los compro yo. Necesito tenerlos, rayarlos si amerita, aprehenderlos.
ResponderEliminarWILLIAM: cumplido!
HUMO: las zapateras prodigiosas van ganando por tandeada! :-)
HEROE: supongo que luego las tocas??? Camisetas de fútbol, jajaj, ese me gustó!
DESPECADOR: de vuelta, qué bien!
Somos fetichistas de las ideas. Es curioso!
ResponderEliminarFANMA: verdad. Y ahora que lo pienso, tampoco me gustan las películas copiadas, pero en este caso no soy obsesiva ni compulsiva para comprarlas. Pero las prefiero originales.
ResponderEliminarHmmm... fetiche, fectiche... Yo no tengo un apasionamiento fetichista por nada en especial, pero si un libro me gusta no me tiembla la mano en pagar 40 mil pesos en él ($76, 60 euros... ya lo he hecho...estúpidos y hermosos libros de diseño!)
ResponderEliminarTambién tengo una rara tendencia por ligar olor-color así que combino la ropa que ando con el "color" del olor del perfume... o sea, tengo colección de perfumes de todos los "colores".
Finalmente, también me obsesiono por combinar la ropa interior... ese sí tiene más pinta de fetiche, por lo que también tengo infinidad de colores y dibujos... menos blanco, fuchi!
MIGNONNE: 1. ya vi tu lista de regalos, jiji. 2. tu obsesión con lo de la ropa interior siempre me ha parecido de lo más sexyfreshcool del mundo. Yo antes combinada braguitas de nylon con blusa pero me cansé. Ya casiiii.
ResponderEliminarSip!!
ResponderEliminarsoy un hombre fetiches... tantos reflejados en mi blog que no sabría por donde empezar
ResponderEliminarfelicidades por tu blog!
ME GUSTAN LOS ZAPATOS DE VERDAD!!!! :)))))
ResponderEliminarCAROS, CARISIMOS Y GANGAS!!